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Beneficios Cardiosaludables del DEPORTE en verano

Beneficios Cardiosaludables del DEPORTE en verano

Durante el verano el buen tiempo nos ofrece más oportunidades de disfrutar del deporte al aire libre. Además, durante esta época el aumento de las temperaturas permite que podamos realizar con mayor libertad deportes acuáticos que son grandes aliados para la salud cardiovascular. Entre los beneficios que podemos encontrar para el sistema cardiovascular al realizar deporte están estos:

  • Permite un mayor control de la presión arterial porque la reduce.
  • Mejora la eficiencia energética del corazón, es decir, hace que éste utilice menos energía para realizar el mismo trabajo.
  • Permite desarrollar nuevos vasos arteriales para favorecer el aporte de sangre y nutrientes al miocardio.
  • Estimula la circulación del músculo cardíaco.
  • Aumenta y mejora la circulación de todos los músculos del cuerpo.
  • Mejora el funcionamiento del sistema venoso con lo cual evita la aparición de varices y trombos.
  • Ayuda a mejorar la actividad del endotelio.
  • Previene la aparición de patologías cardíacas.
  • Disminuye la formación de coágulos.
  • Reduce los niveles de colesterol general.
  • Disminuye los niveles de azúcar mejorando enfermedades como la diabetes.
  • Mejora factores de riesgo cardiovascular como el sobrepeso o la obesidad así como la hipertensión.

Con todos estos beneficios queda evidenciado que el deporte es un gran aliado para la salud cardiovascular y para la salud en general. De hecho, es una herramienta muy importante a la hora de prevenir cualquier tipo de enfermedad e incluso para mejorar la progresión de otras, en su justa medida.
Por este motivo, realizar actividad física de manera regular es beneficioso en cualquier época del año y, de hecho, es lo que recomiendan todos los expertos. En general se aconseja a los adultos realizar al menos 150 minutos semanales de actividad física de intensidad moderada o 75 minutos de actividad intensa. En el caso de los niños de entre 5 y 17 años el número debe ser mayor. Lo recomendable es que sean 60 minutos de actividad física diaria con una intensidad moderada o vigorosa.